El estudio del asma ocupacional consiste inicialmente en comprobar que el trabajador presenta asma y que esta está relacionada con su actividad laboral. Para realizar el diagnóstico etiológico normalmente se recurre a una serie de pruebas cutáneas y algún análisis, pero sin duda alguna, la prueba más importante es la prueba de provocación bronquial, en la que se hace inhalar al paciente aire con la sustancia sospechosa de ser la causante de los síntomas y se realizan pruebas de función respiratoria antes, durante y después de este proceso. Como este procedimiento se lleva acabo en un entorno hospitalario, se realiza de forma controlada para minimizar el riesgo potencial
para el paciente.

Si tiene alguna duda, no dude en exponérsela a su Alergólogo quien le informará más ampliamente sobre estos procedimientos.

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Advertencia: El presente reportaje es simplemente un artículo de
opinión, sin que implique un modelo de actuación médica. El
modelo de actuación será establecido por los propios facultativos
de cada paciente y expertos en alergia/inmunologia.